Tras visitar dos cementerios ''in a row'' me dispongo ahora a atravesar el ring de la Ópera para llegar, caminando hacia el este, a un bonito jardín donde se sitúa, si me lo permites, el monumento más célebre de la ciudad, el ''Monumento a Strauss''.
Esta pequeña figura dorada, de poco más de un metro, es uno de los elementos más conocidos de la ciudad, y todo un símbolo, junto al Prater, la Ópera Estatal o el Stephansdom. El parque, a decir verdad, no es el más bonito de la ciudad (título que en mi opinio ostenta Schönbrunn) pero sí que guarda un encanto especial, típicamente vienés. Disfrutad de las instantáneas que tomé allí. :)